martes, 21 de abril de 2020

DIÁLOGO II



~       
Cuarentena: un mes y un día. Agua, lavandina, lampazo.  Mano izquierda por debajo, mano derecha sobre la parte superior del palo que se oblicua (u oblicúa) para iniciar su habitual movimiento en 45 grados.



~        ¡Basta!
~      (YO)  ¡Mierda! ¿Quién gritó? Esta puta cuarentena me está afectando mal.
~        ¡No es la puta cuarentena! ¡Soy yo!
~     (YO)    ¿Quién? No veo a nadie. ¡Por favor!!!
~        ¡Soy yo, mirá para abajo!
~       (YO)  Sólo veo el piso - balbuceo temerosa, al borde del desquicio.
~        Y sí, ¿qué otra cosa querés ver si te la pasás limpiando  como una energúmena?      

          Dejame una manchita aunque sea, una miguita de pan.
~        (YO)  ………….
~        (PISO) Sí, soy yo, nena, el piso, no estás loca… Bueno, un poco.
~        ¡No lo puedo creer! Hace días hablaba con la tarjeta Sube, hoy con el piso… ¿Qué 
stá pasando?
~        (PISO) Está pasando que me estás volviendo alérgico a la lavandina. ¡Eso está pasando!
~        Uy, perdón.
~        (PISO) Perdón, lo siento, gracias, te amo. Decime las cuatro palabritas y a lo mejor te 
creo.
~        ¡Ah, vos también con el Hoponopono!
~        (PISO) ¿Jopo qué?
~        Dale, no te hagás el bolú que sabés muy bien de qué hablo.
~        (PISO) Sí, sé de qué estás hablando, porque lo estás practicando todos los días. Te 
escucho.
~        ¿Cómo que me escuchás? ¿No lo digo para mis adentros?
~        (PISO) Bue, parece que no siempre.
~        Sí, es una práctica que conozco desde hace tiempo y la verdad es que me hace 
mucho bien. En estos días se me dio por retomarla…
~        (PISO) Claro, y te tomaste muy en serio lo que enseñan por ahí: que hay que limpiar.
~        Y sí…
~        (PISO) Y sí, ¿eso es todo lo que se te ocurre decir?
~        ¿Y qué esperás que te diga? En todo caso, sé claro y no te andes con tanta vuelta.
~        (PISO) No quiero que me digas nada en particular. Sólo

     me gustaría, me haría casi feliz, me aportaría una 
    inconmensurable satisfacción, que pusieras más esmero en
          limpiar hacia adentro que sobre mi superficie.
~        ¿Hacia adentro de qué?
~        (PISO) Ah, bueno, tenemos un día hoy …
~        Sí, un buen día. Hoy me levanté con alegría.. Buen día con alegría. Y me salió r
imado jaja.
~        (PISO) ¿Y expresás tu alegría fregándome en las narices tu trapo con lavandina? ¿No tenés algo un poquito menos aséptico?
~        No me respondiste a eso de limpiar hacia adentro.
~        (PISO) Vos sabés a qué me refiero. Ya tenés años en esto.
~        Sí, tengo años … tengo unos cuantos…
~        (PISO) Uy, se viene el tango, prefiero que sigas con el trapo.
~        Ja ja, muy gracioso. No pensaba hacer ningún tango con el tema de la edad, no es 
mi estilo, así que retomo el hilo de tu conversación…
~        (PISO)Gracias.
~        Por nada…. Como decía, siguiendo con el tema que propusiste..
~        (PISO) Bueno, fue un recurso de supervivencia.
~        Ah, genial, no te interesa.
~        (PISO) Sí, claro que me interesa.
~        Ok,  vayamos allí entonces. Por supuesto que sé de qué se trata eso de limpiar hacia 
adentro. Hacia el interior de una
~        (PISO) O uno.
~         Limpiarnos por dentro de todo lo que ya no nos sirve, lo que ya cumplió su ciclo...
~        (PISO) Sí, muy linda la teoría, pero ¿sabés qué? Me aburre.
~        Bueno, seguí vos ya que la tenés tan clara.
~        (PISO) De acuerdo, pero soltá ese palo, por favor. No puedo dejar de mirarte como 
una amenaza. No te ofendas, ¿eh?
~        Una amenaza ..mmm, interesante.. como el virus…
~        (PISO) Ahí me gusta más.
~        Me alegro. Decía: como la amenaza que parece significar este ser invisible que tiene 
a la humanidad en jaque.
~        (PISO) Efectivamente, un algo invisible y sin embargo tan potente como …
~        Como para ejercer semejante influencia.
~        (PISO) Estamos haciendo un buen equipo, ¿eh?
~        ¿Ahora te gusto?
~        (PISO) ¿Seducción?
~        Pregunta directa.
~        (PISO) Respuesta directa: me gustás.
~        ¿En qué sentido?
~        (PISO) Ya lo arruinaste. Sigamos con el tema.
~        Sí, mejor. ¿De qué estábamos hablando?
~        (PISO) De la limpieza…. ¡No, el trapo no, por favor!!
~        Ja ja, era un chiste, sólo quise molestarte un poquito.
~        (PISO) Como siempre.
~        Bue, sigo yo.
~        (PISO) Como siempre.
~        En resumen: A) pequeño ser imperceptible aterra a toda la humanidad. B) ¿Qué hay 
que limpiar? C) Todo lo invisible que hay en nuestra mente actuando de un modo         imperceptible y que no nos atrevemos a indagarlo porque nos aterra como si fuera un tremendo monstruo.
~      (PISO) ¿Y cuál vendría a ser tu monstruo?
~        Es lo que estoy limpiando.
~        (PISO) ¿Evadiendo la pregunta?
~        Evadiendo la respuesta, pero sólo para vos, no para mí.
~        (PISO) …………
~        ¿No hablás más?
~        (PISO) Es que quedé absorto en tus reflexiones. Casi brillante lo tuyo.
~        No tan brillante como podrías verte si te pasara el trapito de nuevo.
~        (PISO) ¡Basta! ¡Piedad, por favor!
~        Era otra broma ja ja. Relajate, que ya estoy aflojando con la lavandina.
~        (PISO) Al fin una buena noticia.
~        Sí, la buena noticia es que podemos estar bien y que el 

        monstruo tan temido puede convertirse en una mota de polvo ...
~        (PISO) Como las que ya no quedan sobre mí.
~        ¿Sabés que ahora me despertás compasión? Que no es lástima, ¿eh? Compasión: 
comprendo tu sentir.
~        (PISO) Ah, y yo empiezo a quererte.
~        Y yo a quererme.
~        (PISO) Misión cumplida.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

De la incoherencia a la cohesión: el año del lavarropas

Motivada por algunos hechos, me encontré un día pensando que la impunidad, sostenida en el tiempo, hace que la humanidad se estanque, simple...